21 julio, 2014

El Hombre Efímero


Acabábamos de regresar de una tranquila y civilizada tarde en el bar cuando nuestra última clienta llego a Baker Street. Ella era enfermera. Y, aparentemente, había salido a cenar. Con un fantasma.


La clienta (me pidió no revelar su nombre) nos dijo que había tenido una cita y que todo había ido bien. Él había sido el perfecto caballero, aparentemente. Intercambiaron números pero, cuando él no se comunicó, ella fue a su departamento para ver que todo estuviera bien. Y resulto que no, nada estaba bien. Porque de acuerdo con el casero, el chico que estaba en ese departamento había muerto una semana antes. Entonces ella encontró un sitio web donde otras mujeres estaban hablando sobre experiencias similares.

Sherlock fue al sitio web y encontró un grupo de mujeres que creían haber conocido al mismo hombre. Aunque no pudo encontrar una conexión entre ellas. Tenían diferentes pasados e intereses. El hombre dio un nombre diferente en cada ocasión. Pero entonces él resolvió cómo lo había hecho. Tomaba los nombres de personas de los obituarios. Encontraba hombres solteros recientemente fallecidos que habían vivido solos y llevaba a las mujeres a las casas de los fallecidos. Así que en cada ocasión, él había tomado la identidad de un hombre muerto por sólo una noche.

Pero, aunque estaba complacido por haber resuelto cómo sucedió todo, Sherlock estaba enojado por no poder resolver el por qué lo había hecho.

Porque a veces Sherlock puede de verdad ignorar lo que es estúpidamente obvio. Señalé que existía una pequeña posibilidad de que allá afuera existiera un hombre que solo quería unas cuantas aventura de una noche. Lo sé, impactante revelación. Caso resuelto.


6 comentarios

Donna Staveley - 21 de Julio 

¡HOMBRES!

Dame Latif - 21 de Julio 
¡LO SE!

John Watson - 21 de Julio
Aunque, un muy buen truco.

Harry Watson - 21 de Julio
¡JOHN!

Mary Morstan - 21 de Julio 
¡JOHN WATSON!

John Watson - 21 de Julio 
Perdón.